"...NUESTRO NORTE ES EL SUR..." J.TORRES GARCIA (URUGUAY)
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JOSÉ MARTÍ - Cuba / 1853 – 1895
"...LA UNIVERSIDAD EUROPEA HA DE CEDER A LA UNIVERSIDAD AMERICANA. LA HISTORIA DE AMÉRICA, DE LOS INCAS ACÁ, HA DE ENSEÑARSE AL DEDILLO, AUNQUE NO SE ENSEÑE LA DE LOS ARCONTES DE GRECIA. NUESTRA GRECIA ES PREFERIBLE A LA GRECIA QUE NO ES NUESTRA. NOS ES MÁS NECESARIA..."
A mi lado sin tregua el Demonio se agita;
En torno de mi flota como un aire impalpable;
Lo trago y noto cómo abrasa mis pulmones
De un deseo llenándolos culpable e infinito.
Toma, a veces, pues sabe de mi amor por el Arte,
De la más seductora mujer las apariencias,
y acudiendo a especiosos pretextos de adulón
Mis labios acostumbra a filtros depravados.
Lejos de la mirada de Dios así me lleva,
Jadeante y deshecho por la fatiga, al centro
De las hondas y solas planicies del Hastío,
Y arroja ante mis ojos, de confusión repletos,
Vestiduras manchadas y entreabiertas heridas,
¡Y el sangriento aparato que en la Destrucción vive!
Sobre «El Tasso en prisión»
En su celda, el poeta, harapiento y enfermo,
Teniendo un manuscrito bajo su pie convulso,
Contempla con mirada inundada de pánico
La escalera de vértigo donde su alma se abisma.
Las risas enervantes que pueblan la prisión,
Arrastran su razón a lo absurdo y lo extraño;
La Duda lo rodea y el ridículo Miedo,
Odioso y multiforme, circula en torno de él.
Este genio encerrado en un antro malsano,
Esas muecas y gritos, espectros cuyo enjambre
Amotinado gira detrás de sus oídos,
El soñador a quien el horror despertara,
Tal es tu emblema, Alma de tenebrosos sueños,
Que ahoga la Realidad entre sus cuatro muros.
El vampiro:
Tú que, como una cuchillada;
Entraste en mi dolorido corazón.
Tú que, como un repugnante tropel
De demonios, viniste loca y adornada,
Para hacer de mi espíritu humillado
Tu lecho y tu dominio.
¡Infame!, a quien estoy ligado
Como el forzado a su cadena,
Como al juego el jugador empedernido,
Como el borracho a la botella,
Como a la carroña los gusanos.
-¡Maldita, maldita seas tú!
Supliqué a la rápida espada
Que conquistara mi libertad
Y supliqué al pérfido veneno
Que sacudiera mi ruindad.
¡Ay! el veneno y la espada.
Me desdeñaron diciéndome:.
-No eres digno de que se te libere
De tu esclavitud maldita.
-¡Imbécil! -Si de su dominio
Te libraron nuestros esfuerzos,
Tus besos resucitarían
El cadáver de tu vampiro.
La plegaria de un pagano:
No dejes morir tus llamas;
Caldea mi sordo corazón,
¡Voluptuosidad, cruel tormento!
Diva! supplicem exaudî!
Diosa en el aire difundida,
Llama de nuestro subterráneo,
Escucha a un alma consumida
Que alza hacia ti su férreo canto,
¡Voluptuosidad, sé mi reina!
Toma máscara de sirena
Hecha de carne y de brocado,
O viérteme tus hondos sueños
En el licor informe y místico,
¡Voluptuosidad, fantasma elástico!
Spleen:
Cuando el cielo bajo y grávido pesa como una losa
Sobre el gimiente espíritu presa de largos tedios,
Y el horizonte abarcando todo el círculo
Nos depara un día negro más triste que las noches;
Cuando la tierra se ha convertido en un húmedo calabozo,
Donde la Esperanza, como un murciélago,
Se va dando golpes contra las paredes con sus tímidas alas
Y chocando la cabeza con los techos podridos;
Cuando la lluvia esparciendo sus inmensos regueros
Imita los barrotes de una vasta prisión
Y un pueblo mudo de infames arañas
Viene a tender sus trampas en el fondo de nuestros cerebros,
Unas campanas empiezan de pronto a tocar furiosamente
Y lanzan al cielo un aullido espantoso,
Como los espíritus errantes y sin patria
Que se ponen a gemir con porfía.
El Aparecido:
Como los ángeles de fiera mirada,
Volveré a tu alcoba
Y me deslizaré hasta ti sin ruido
Con las sombras de la noche;
Y te daré, morena mía,
Besos fríos, como la luna,
Y caricias de serpiente
Arrastrándose en torno a una fosa.
Cuando llegue el alba lívida,
verás mi lugar vacío,
y helado ya, hasta la tarde.
Como otros por la ternura,
quiero reinar por el espanto
sobre tu juventud y tu vida.
La gaita gallega, con un tubo melódico (punteiro) y uno o varios bordones (ronco o roncón, ronquilla o ronqueta, y chillón o pieiro). Aunque antiguamente se construía y tocaba de acuerdo con una digitación semicerrada, entre finales del siglo XIX y comienzos del XX empezó a ser modificada, de modo que hoy funciona con una digitación abierta similar a la de la flauta dulce.
No se sabe exactamente cuándo apareció la gaita, aunque se conservan pinturas y grabados del Antiguo Egipto en las que se representan a músicos tocando un instrumento muy semejante a la gaita actual. Los antiguos griegos conocían la gaita (askaulos) y entre los antiguos romanos la gaita (tibia utricularis) era el instrumento de la infantería romana, que también tocaba el emperador Nerón.
En Europa no se vuelven a tener referencias de la gaita hasta los siglos IX y X d. C., y fue en la Baja Edad Media cuando la gaita obtuvo gran popularidad en todo el continente, entrando en decadencia a partir del siglo XVIII, aunque sobrevive en el ámbito de la música popular y en zonas marginales, como Galicia, Asturias, León, Cantabria, Escocia, Irlanda, Bretaña, etc.
Aparte de varios dibujos y grabados antiguos, en el palacio faraónico de Tell-el-Amarna en Egipto, la referencia escrita más antigua de un instrumento considerado como gaita se produce posiblemente hacia el 400 a. C. cuando Aristófanes, un poeta ateniense, menciona a los gaiteros de Tebas, ciudad enemiga de Atenas en aquella época, y señala que tocaban gaitas (askaulos) hechas con piel de perro y punteros de hueso.
Antes del siglo XII sólo sobreviven unos pocos grabados de pictos, irlandeses y célticos que muestran que durante la Alta Edad Media se siguieron utilizando las gaitas como instrumentos musicales.
Se debate sobre el momento en que las gaitas aparecieron entre los pueblos célticos de las culturas atlánticas, aunque las estatuillas de gaiteros en varios yacimientos arqueológicos de época romana sugieren que posiblemente fueran los romanos quienes las introdujeron. En Irlanda no aparecen referencias escritas hasta entrada la Edad Media y los grabados mencionados se remontan al siglo VIII.
En la Península Ibérica pueden encontrarse hasta 6 tipos diferentes de gaita, organológicamente hablando, aunque pertenecen a diferentes familias según su técnica constructiva y su morfología. Por supuesto, esto no quiere decir que todas ellas tengan la misma vitalidad ni el mismo número de practicantes. Serían las siguientes:
1-Galicia, León y Portugal
2-Principado de Asturias, tercio oeste de Cantabria y zonas del norte de León
3- Aragón
4-Portugal, León y Zamora
5-Salamanca y Extremadura
6- Cataluña